Para la aparición de várices, influye especialmente la parte genética, aunque la obesidad, la vida sedentaria y el embarazo también son factores que favorecen el desarrollo. Las venas y arterias son las encargadas de transportar la sangre desde el corazón al resto del cuerpo.
Desafortunadamente, cuando las venas han perdido elasticidad, comienzan a dilatarse y como consecuencia, la sangre se almacena en las piernas generando entonces insuficiencia venosa y esto se manifiesta en forma de várices.
La crema Varigo de uso tópico, activa su funcionamiento a través de la penetración interna de su composición. Los componentes incluidos en la formulación aportan una mejora del sistema circulatorio eliminando la coagulación de la sangre y mejorando el flujo sanguíneo. De esta manera contribuye eficazmente a restaurar las paredes venosas.
Además, da un aporte vitamínico con nutrientes que son esenciales para la salud de las piernas. A pesar de ser de uso externo, la fórmula está diseñada para que, al aplicarse, su penetración sea profunda llegando a cada capa de la piel.
El producto además ofrece efectos antiinflamatorios y analgésicos que permiten dar alivio y pronta recuperación.